En mi juventud (entonces el aeropuerto no estaba vallado), nos metíamos en la misma cabecera de pista, nos tumbábamos en el suelo y veíamos aterrizar los aviones que pasaban a pocos metros encima de nosotros. Creo que tengo alguna diapositiva de aquellos tiempos. Es en efecto un sitio muy fotogénico. Excelente toma, enhorabuena Pixel!