No sabía dónde poner esta foto y la que seguirá mañana, pero creo que es arquitectura industrial, de modo que la he colocado aquí.
Sa Teulera, la tejera en mallorquín, me había llamado la atención unos días antes al pasar por la carretera. De modo que una tarde soleada de ambiente despejado y una luz de estudio fotográfico decidí acercarme. Llevaba el Summarit 35 f/2.5 que me había prestado Delfí, que ya me había maravillado por sus cualidades y la nitidez y falta de aberraciones en las fotos producidas. Mi mujer y yo, siguiendo la costumbre, nos metimos por el camino que llevaba al tejar por el morro, bajamos del coche y nos pusimos a hacer fotos de un espectacular montón de chatarra. No tardó en llegar Pedro, el dueño, con cara de pocos amigos, pero al final nos dió permiso para entrar y tomar fotos.
El tejar estaba en la penumbra, con una luz mallorquina muy potente que entraba por las aberturas. El tejar, por dentro, con sus tejas, sus hornos, la maquinaria, 5 cm de polvo por todas partes: un espectáculo de luces, sombras, texturas, formas... pero difícil, el rango dinámico por las nubes. Todas las tomas fueron únicas, no hay tratamiento HDR, sólo usé trípode para poder trabajar con exposiciones largas.
El Summarit de Delfí es una maravilla. Fijaos en esta foto: la distancia al fondo era de 30 m como mínimo y ya veis, a f/4, enfocando a medio pasillo, queda una imagen nítida entre los 2 metros y el infinito. Tengo otra similar tirada a f/16 que casi no se distingue de esta.
Al irnos fuimos a despedirnos de Pedro y de su madre, que estaban sembrando cebollas en el campo colindante, y acabamos la mar de amigos, haciéndoles un retrato que prometí llevarles por Semana Santa. El encanto de la fotografía...
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